Tras una Locura Sosegada

Amaneció de nuevo esa pequeña pero GRAN  ciudad Mozárabe llamada Granada, sin previo aviso un pequeño mutante empezó a sonar sin control alguno, recordándome una vez más que era la hora imperfecta para arrancar un nuevo día.

Con los ojos medios abiertos y con cara de Zombie,  me adentré en ese pequeño mundo cuya melodía responde dulcemente a ducha, después de observar todo el vaho almacenado en ese espejo espectacular, me decido a buscar esa pequeña silueta cabril detrás de todo esa neblina ¿y que es lo que me encuentro? un rostro endemoniado cuyo color rozado le hace más pipiola.

Al son de esa melodía procedente de Europa Fm, termino de engalarme para conseguir solo por una vez, que la gente no salga corriendo en cuanto me ve.

Después del ultimo retoque, voy en  busca y captura de ese "bolido" de cuatro ruedas, capaz de llevarme a los sitios mas sorprendentes y temidos a  la vez.

Llego a mi nuevo destino, subo esa montaña rusa llamada escaleras de caracol,  y me adentro en ese mundo que tanto adoré en antaño. 

Me ha encantado recordar de nuevo esa sensación de saber que no soy la única pipiola en la empresa, me ha encantado sentir el murmullo de todas y cada unas personas que han pasado a  lo largo  del  día. E incluso me ha encantado comer a una hora decente, ya que en los últimos 5 años terminaba por comer muchos de los días a las 21:00.

Sé que me queda aún mucho camino por recorrer, pero no me importa, intentaré al menos saborear cada instante que pueda.

"Todo lo que hagas en la vida puede que sea insignificante o no , pero es muy importante que lo hagas, porque nadie más lo hará"